¿HABLAN REALMENTE LOS LOROS?

Los loros poseen un órgano vocal entre la tráquea y los bronquios, denominado siringe, y una lengua carnosa y móvil. Por eso, pueden dar forma al aire y emitir sonidos. En realidad, estas aves no hablan, sino que tienen una increíble y gran capacidad para repetir e imitar todo tipo de sonidos, incluso las voces de los humanos. Los loros no tienen cuerdas vocales, sino que el órgano siringe es el que les permite producir sonidos complejos aún careciendo de cuerdas vocales a través de vibraciones y la variación de estas gracias a su sistema respiratorio único.
 Algunas especies son más capaces de reproducir sonidos humanos que otras, y en general, si se quiere tener un loro que hable se debe conseguir uno muy joven al cual se le vayan enseñando las palabras o uno más viejo que ya haya aprendido.
Éste es un mecanismo de socialización y responde a que en estado natural viven en bandadas y se comunican permanentemente los loros con sus pares.
Los loros hacen sus nidos en los árboles o en los huecos de los barrancos. Apenas asoma el sol, se reúnen en los árboles y salen en bandadas a buscar alimento. Durante el mediodía suelen cobijarse a la sombra de los arboles más tupidos. Cuando baja el sol, estas aves se reúnen en los árboles mas despojados para "charlar", y se retiran a sus nidos para descansar cuando anochece.
         
         

A los loros les encanta chapotear cuando encuentran agua fresca.
Sus ojos son redondos y van cambiando de color a medida que las aves crecen.
Son aves prensora que pueden aferrarse a las ramas de los árboles con una pata y sostener el alimento con la otra. Las patas de los loros hacen las veces de manos.
La pata tiene cuatro dedos: dos están dispuestos  hacia adelante, y los otros dos, hacia atrás. Los dedos funcionan como resortes que se estiran cuando se aferran a una rama o semilla.
En la mandíbula superior del pico se encuentran dos pequeños orificios que constituyen la nariz de las aves. Poseen un pico fuerte y curvo cuya mandíbula superior es articulada y móvil. Pueden utilizar sus patas o su pico indistintamente para trepar.
Las plumas son un indicador de calidad de vida de un loro. Si hay cambios de temperatura bruscos, se caen con más asiduidad. Tienen las plumas de la cola más largas porque sirven de timón durante el vuelo y le dan equilibrio al cuerpo cuando el ave esta parada.

CASI COMO MANOS
La lengua de los loros es redonda, áspera y carnosa. Puede ubicar las semillas en una posición que permite que el pico las parta sin dificultad y también separar la pulpa de la cáscara, entre otras cosas.

AVES TRAMPOSAS

Existen muchas aves que imitan el canto de otros pájaros o el sonido  ambiente, como el cenzontle, una ave que habita en América del Norte. Los cenzontles que viven en las zonas urbanas son capaces de imitar ruidos de las maquinas incluso de los autos.

¿SON INTELIGENTES?
Los loros grises africanos fueron estudiados por la etóloga estadounidense Irene Pepperberg. La científica puso a prueba la capacidad de aprendizaje de estas aves y llegó a la conclusión de que son muy inteligentes, capaces de aprender y utilizar palabras para identificar diversos objetos, contarlos y clasificarlos.